- Llamamos a estas notas "apuntes de la realidad" porque las propuestas que contienen proceden de la observación de realidades existentes y no de especulaciones teóricas. De ahí, su fuerza y sus debilidades.
- Buscar la eficacia de las organizaciones políticas locales, sólo puede interesar a miembros de partidos tradicionales que pretendan una metamorfosis de los mismos más allá de las direcciones burocráticas, y a los miembros de los nuevos partidos y coaliciones que, de verdad, no quieran caer en la fatalidad de la burocracia como única fórmula de organización política. De unos y otros, agradeceré aportaciones para completar buenas prácticas.
Una visión del barrio como unidad de arquitectura
social y política.
Si se
pretende que una cierta acción política sirva para dar estabilidad a unos
resultados políticos habrá que partir de una manera de ordenar la realidad de
modo que sea posible establecer relaciones de causalidad entre los esfuerzos y
los resultados.
Por otro
lado, las respuestas que los votantes, donantes y voluntarios, llevan a cabo
ante las actuaciones políticas, pueden ser muy distintas si pueden relacionar
estas actuaciones con su propia calidad de vida, que si se trata de beneficios
abstractos cuya repercusión en la propia vida no se puede apreciar con claridad.
Se puede
decir, por ello, que las necesidades de un barrio es la base de la política
democrática. En una unidad pequeña – no más de unos 10.000 electores – donde son
posibles las interacciones cara a cara, y cada ciudadano puede comprender sus
necesidades y cómo se satisfacen/no se satisfacen, y cómo inciden en ellos las
actuaciones públicas.
En el
interior de un barrio, existen necesidades e intereses que persiguen personas
diferentes que pueden formar grupos, y surgir en ellos liderazgos sociales,
cuya fortaleza puede repercutir en la fuerza con que los grupos pueden influir en
la satisfacción de sus propósitos.
En la
realidad, nos vamos a encontrar con situaciones donde un barrio está claramente
establecido tanto por la historia como por la ley, como es el caso de ciudades de
no más de 20.000 habitantes. Y otras situaciones en ciudades más grandes y, sobre
todo, en las grandes ciudades, donde junto a algunos barrios con historia, que
han subsistido, hay una cantidad importante de habitantes que no forman
barrios, sin perjuicio de las delimitaciones administrativas de barrios y
distritos. El fenómeno de urbanización rápida, sin que nadie se propusiera
ordenarla, explica esta situación.
Un conjunto
de ciudadanos que habitan el territorio que podría dar lugar a un barrio, se
encuentran ante las siguientes cuestiones políticas: como resolver los
conflictos que puedan existir entre sus intereses o necesidades, cómo
satisfacer esos intereses por sus propios medios o por la presión/mediación
sobre las instituciones públicas.
Los
lideres sociales, en la medida que deben identificarse con los intereses
particulares de unos ciudadanos, y contribuyen a su acción colectiva, pueden
tener influencia sobre las decisiones públicas de esos mismos ciudadanos, pero
también pueden tener dificultad para encontrar el consenso con otros líderes
que representen otros intereses.
SIGUE
--------------------------------------------------
Leer + en otras entradas de este blog y en www.marcoslekuona.net
Seminarios: CONVERSANDO PARA COALIGARSE, COMO GANAR Y NO PERDER VOTANTES, PRACTICAS DE GOBERNANZA EFICAZ.
No hay comentarios:
Publicar un comentario