Entradas populares

lunes, 30 de julio de 2018

COMO SE VAN DESHACIENDO LAS ORGANIZACIONES/COMO SE HAN IDO DESHACIENDO

UNA ENTRADA ANTERIOR, A LA QUE AHORA SOLO AÑADO EL PRETÉRITO EN EL TÍTULO




Creo tener identificados en la práctica personal - y de otros colegas -tres procesos que, en la medida que avanzan, generaninteracciones tóxicas que están deshaciendo las organizaciones. Estas interacciones tóxicas van minando la eficacia de las organizaciones, al mismo tiempo que se reduce la implicación de parte de sus miembros, junto a la desafección de entornos significativos. Por este camino, las organizaciones afectadas, pueden llegar a desaparecer totalmente o en alguna de sus partes, o quedar reducida a un papel secundario.
Sin perjuicio de dedicar a esta cuestión los resultados de más observaciones y reflexiones individuales y colectivas, ahora puedo avanzar los siguientes rasgos de estos procesos  destructivos:
Ø  Cuando se van abandonando, sin motivos justificados,  procedimientos, métodos de trabajo y/o reglas de decisión, legitimados por los resultados, el consenso o la tradición, parte de sus miembros reducen su implicación, otros valiosos abandonan la organización, generalmente, con repercusiones negativas en el entorno.
Ø  Cuando no se identifican buenas prácticas y buenos practicantes, ni se hace suficiente por conservarlas y trasmitirlas, perdiéndolas cuando los buenos prácticos abandonan sus puestos – por salida o relevo natural. En estas situaciones, la organización no mejora su eficacia/eficiencia, los nuevos no aprovechan la experiencia ya vivida y pueden “reinventar la rueda”, a veces cuadrada.
Ø  Cuando un sistema de liderazgo no es capaz de limitar el despilfarro de energía que pueden generar las  luchas internas por el poder y sus posiciones, lo pactos pacificadores no logranproducir coaliciones(=crecer juntos) suficientemente maduras y dominantes. Un descontrol, no siempre aparente, mantiene problemas importantes sin resolver, sin que se trate de que no están resueltos, ni se trate el que no se trata – trampa que va deshaciendo las interacciones de colaboración.



La crisis incide en la visibilidad y en el efecto maligno de estos procesos. En las organizaciones grandes, es posible utilizar análisis comparativos entre sus unidades componentes, para identificar y analizar estos procesos.
Es posible, detener estos procesos y revertir sus resultados negativos, cuando en cada situación autónoma un número de personas con influencia, son capaces de ir constituyendo unsistema de liderazgo, que genere que sus miembros se  impliquen más – productividad/innovación - y sus entornos se “reafecten”.  

DE LA MENTALIDAD BUROCRÁTICA (AUTORITARIA) A LA MENTALIDAD EMPRENDEDORA (DEMOCRÁTICA)

ENTRADAS ANTERIORES


LUNES, 15 DE JULIO DE 2013




DE LA MENTALIDAD BUROCRÁTICA(AUTORITARIA)...





La mentalidad burocrática, en el contexto del sistema correspondiente, se va generando siguiendo aproximadamente este ciclo:

  • Se parte de un contrato patriarcal con la organización: sumisión a la autoridad, negación de la autoexpresión de los propios valores,sacrificio por recompensas  futuras no nombradas, creencia en que lo de arriba siempre es justo.
  • Se actúa en función de un interés propio miope: el mito de que el avance organizativo y autoestima están relacionados,interés por ser promovido al círculo de los ganadores, ganar la aprobación de los de arriba; esforzarse por recibir aumentossignficativos de salario o poder; procurar crearse seguridad   en el puesto de la organización; esforzarse por tener más gente y mas funciones bajo nuestro control.
  • Se practican tácticas manipulativas: maniobrar las situaciones, y, a veces, a las personas. Dirigir la información y los planes cuidadosamente para la ventaja propia, ser estratégico e instrumental en las relaciones; buscar la aprobación casi solo de los de arriba.

../.. sigue

Un terapia para ir superando la mentalidad burocrática, se encuentra en los dialogos sobre valores de los que hablaremos pronto, junto con otros instrumentos del Arte de Despertar a la Gente, de nuestros viejos conocidos Cloke y Goldsmith , los del "fin del management" y el "surgimiento de la democracia organizativa."
-----------------------------------------------------------

El texto de esta entrada está en las páginas 102 y 103 del libro COMO GANAR(Y PERDER) VOTANTES, en el que puede leerse + sobre esto en las páginas 100, 101 y 102, y en otra partes del libro. puede descargarse libremente en www.fcampalans.cat/uploads/publicacions/pdf/comoganaryperdervotantes_def.pdf






 de  de los que hablaremos pronto

MARTES, 16 DE JULIO DE 2013

...A LA MENTALIDAD EMPRENDEDORA (DEMOCRÁTICA)




Los nuevos liderazgos que la nuevas circunstancias están haciendo surgir - y que ya existían en algunos sitios- sustituyen la dependencia por la autonomía y el autocontrol. Los partidos tienen una vía para ir construyendo su hegemonía, en la que asumir la empresa de contribuir a ir generando esos nuevos liderazgos. Sus militantes y cuadros deben abandonar cuanto antes la mentalidad burocrática - que contribuye a que se mantenga el statu quo . e ir adquiriendo una mentalidad emprendedora en la producción de la autonomía y autocontrol de las personas, que debe substituir  la dependencia y el control por otros.

La mentalidad emprendedora parte de un contrato emprendedor: ser cada uno su propia autoridad, estimular la expresión de los propios valores,tomar compromisos, creer que lo de arriba no siempre es justo.

Se guía por un interés propio ilustrado: encontrar significado a lo que se hace, preocuparse por la contribución y el servicio, integridad, buscar el impacto positivo en los otros, esforzarse por la maestría en lo que se hace.

Despliega tácticas auténticas: decir no cuando se quiere decir no, compartir la mayor información posible, usar un lenguaje que describa la realidad, evitar reposicionarse para conseguir la aceptación de los de arriba.

Así la autonomía sustituye a la dependencia.




Es improbable que militantes y cuadros,como elementos activos de las redes sociales partidarias tengan interés en los valores de los votantes, si ellos se niegan el derecho a actuar según los suyos. Aquí puede ser oportuno traer las ideas de G. Lakoff sobre el pragmatismo político.

"Hay dos tipos de pragmatismo político y los dos están dispuestos a hacer concesiones pero por razones distintas. El pragmático auténtico entiende que no se puede lograr todo lo que se considera justo, pero se puede conseguir mucho negociando. Por el contrario, el pragmático no auténtico está dispuesto a abandonar sus valores a cambio de una ganancia política.
Hay una gran diferencia entre estos dos tipos de líderes políticos, aunque voten de la misma manera. El pragmático auténtico mantiene un visión moral consistente, mientras que el pragmáticPágs.54 y 55 de "Puntos de Reflexión,. Manual del progresista" ,2008, editado por Península)
o no auténtico renuncia a su visión moral" (

-------------------------------------------------------------------------------------------------

Eltexto pertenece a las págs. 103 y 104 de COMO GANAR (Y PERDER) VOTANTES,que puede obtenerse libremente en www.fcampalans.cat/uploads/publicacions/pdf/comoganaryperdervotantes_def.pdf
Leer + en REVITALIZANDO EL PARTIDO. Cuadernos de Trabajo para Cargos Públicos y sus Asesores. Nº 17. www.marcoslekuona.net

domingo, 29 de julio de 2018

ORGANIZANDO PARA POLITICOS DEMOCRÁTICOS Y DE IZQUIERDAS



En noviembre pasado, la revista digital SI ME QUIERES ESCRIBIR de Zona Roja, publicó mi artículo Crisis, Organización y Socialdemocracia, donde inicié una exploración de cómo las prácticas de organizar la política podían estar jugando un papel relevante en la crisis de los partidos socialdemócratas y de los partidos de izquierdas y progresistas, en general.

Ahora me propongo, profundizar en la relevancia de ese papel en otros artículos y explorar vías prácticas de superación de  las desafecciones y derrotas.

En esta entrada y algunas que vendrán después, voy a adelantar algunas ideas clave, que pretenden romper el círculo vicioso en que encierra la organización burocrática a las fuerzas que quieren cambiar.

Efectivamente, la mentalidad y las prácticas de dirección burocráticas están impidiendo que se exploren otras formas de organización – que llamaremos de modo genérico democráticas -, que pueden permitir encontrar vías de mejora de la situación.

Las formas de organización democrática – a diferencia de las burocráticas – no pretenden conseguir el control de arriba abajo, que se ha demostrado que no es posible y producen resultados contrarios.

Por el contrario, opone dos principios opuestos:
v No es posible y no debe intentarse cambiar organizaciones grandes globalmente y desde arriba.
v Los cambios serán posible en la medida que líderes formen a otros líderes y sucesivamente y los grupos así liderados tejan coaliciones de abajo arriba  que negocien los cambios con las cúspides burocráticas.

La difusión del liderazgo – líderes formando líderes -, la identificación, selección y entrenamiento de muchos líderes, será la palanca clave para ir estableciendo una nueva sociedad.

Voy a continuar por esta línea, mezclando mis experiencias y observaciones personales con  tres fuentes de pensamiento no burocrático:
v Ignacio de Loyola y las prácticas organizativas de su Compañía.
v Edgar Morin y su propuesta de cambio a través de la metamorfosis de los sistemas.
v Marshall Ganz, que después de una muy larga experiencia práctica y docente de organizar para cambiar, lanzaba este último mes de marzo la consigna de reconstruir la infraestructura de la democracia





domingo, 15 de julio de 2018

MARKETING POLÍTICO ORIENTADO AL VOTANTE




En los últimos tiempos, casi no se habla de marketing político, salvo para mencionar aspectos engañosos y manipulativos. Así, se menciona no sólo por tertulianos, sino por articulistas reputados. Pero lo cierto es que este uso no es más que una simplificación perezosa. Hay diferentes maneras de practicar el marketing en el ámbito de la política.
Jennifer Lees-Marshment[1], profesora asociada en la Universidad de Auckland (NZ), en su libro POLITICAL MARKETING:PRINCIPLES AND APPLICATIONS (2ª edición, 2014, por Routledge), “distingue entre dos aproximaciones muy diferentes: el marketing político orientado a la venta y el orientado al mercado. Los conceptos de partido orientado al mercado y partido orientado a la venta sugieren relaciones muy diferentes entre partidos y votantes. El partido orientado a la venta pretende persuadir y cambiar los pensamientos, mientras en contraste, el partido orientado al mercado persigue responder a las visiones de los votantes. No solo la orientación que un partido elige impacta en su apoyo electoral, sino cada concepto tiene consecuencias potenciales positivas y negativas para la democracia”


Resultado de imagen de jennifer lees marshment


El partido orientado a la venta utiliza la inteligencia de marketing no para definir su política – el “producto político”, la oferta/manifiesto electoral – sino para encontrar el modo más eficaz de encontrar los votantes más persuadibles y venderles el partido como mejor opción. utilizando las últimas técnicas de publicidad y comunicación. “Un partido orientado a la venta tiene consecuencias democráticas tanto positivas como negativas. . El marketing usado de esta manera puede ayudar a políticos a defender su posición más eficazmente y ganar apoyo para políticas en las que creen, añadiendo a veces nuevas aproximaciones al gobierno para llevar adelante su agenda. Sin embargo, también da a elites manipulativas poder para ganar apoyo para iniciativas que otros podrían argumentar que no son buena cosa para el país o el mundo.
El partido orientado al mercado utiliza la inteligencia de marketing inicialmente para definir su política a la vista de las preferencias de los votantes actuales y potenciales, que va identificando. En el proceso del marketing orientado al mercado, esta fase de “diseño del producto” viene seguida de otra de “ajuste del producto” para asegurar su factibilidad – que asegura que el gobierno podrá hacerlo efectivo-; la reacción interna que asegura que conseguirá el apoyo adecuado de los cargos públicos, cuadros y militantes del partido; competencia, que permite diferenciarse de la oposición; y el apoyo de los votantes necesarios para cubrir las metas propuestas, sin caer en la aproximación “atrápalo- todo. Una cuarta fase distintiva es la de “puesta en práctica” de los cambios implicados que requiere liderazgo y dirección política durante el plazo de tiempo apropiado para conseguir la aceptación necesaria, crear unidad de partido y el entusiasmo sobre el nuevo diseño, en su caso.  
El partido orientado al mercado puede ser visto como más democrático en la medida que anima de los políticos a escuchar y responder a su público a través de la inteligencia de marketing. Sin embargo,  también contradice la visión convencional de que las elites son elegidas para decidir lo que es bueno, en nombre del público.

Desde mis primeros tiempos, ya lejanos, de consultor de marketing para empresas privadas, para mi – y creo que para los más solventes profesores de marketing – el marketing “verdadero” ha sido el marketing orientado al mercado. Y otra cosa, ha sido y es, cualquier intento de dar honorabilidad añadida a métodos crudos de venta y publicidad.

Pero sí es cierto, que pocos partidos practican un marketing orientado al votante, y que, algunos que lo han intentado lo han abandonado a medio camino. Lo que no impide que existan municipios en que su práctica real explique el mantenimiento de un partido en el poder durante largo tiempo. Pero el predominio de formas burocráticas de dirección no convive bien con esta orientación.

Unas observaciones finales
Ø   Prefiero utilizar la expresión de “marketing orientado al votante”, porque entiendo que es más propio utilizar métodos que den más énfasis a las diferentes criterios y procesos de decisión de los diferentes votantes individuales y huir de métodos que tiendan a tratamientos más o menos masivos. La comunicación política será más eficaz cuanto más selectiva sea. Sin olvidar que buenas mayorías se consiguen, muchas veces con los votos de no más de la tercera parte de los electores.
Ø   Falta dar más atención a la educación política de los votantes, entrenándolos en identificar sus necesidades/intereses personales y en priorizarlos colectivamente en comunidades y barrios. A este respecto, una buena parte de la comunicación política debería dirigirse a prestar a los votantes servicios políticos que le vayan ayudando a formar y manifestar su voluntad política.La práctica del marketing orientado al votante, puede ser un instrumento al servicio, de la participación ciudadana, la política de abajo arriba y democratización de las organizaciones políticas.



[1] Jennifer Lees-Marshment fue muy importante para mí con sus libros y sus artículos, cuando, en el año 2.000 ensayé de hacer una síntesis de mi experiencia de consultor de marketing en el mundo empresarial, con los 20 años de experiencia como consultor  de organización y dirección de gobiernos locales y autonómicos. Después tuve oportunidad de colaborar con ella escribiendo en la newsletter del PSA Political Marketing Group y presentando una ponencia en una reunión anual Endimburgo, que recojo en mi página web. En las páginas 155/157 de la primera edición del libro mencionado participé con un pequeño caso de estudio sobre “Los problemas de poner en práctica la planificación a medio plazo de los partidos en España”. Hoy, esta profesora escocesa  con los 14 libros de los que es autora/editora es un líder mundial del marketing político.

sábado, 7 de julio de 2018

DEMOCRATIZANDO LAS ORGANIZACIONES. Evocación de un lector

DOMINGO, 5 DE AGOSTO DE 2012

DEMOCRATIZANDO LAS ORGANIZACIONES

Con la conferencia del 26 de julio pasado, en la Graduate School of Political Management de Washington siento que he completado un círculo que pretendí trazar a partir de las dos conferencias con la Barcelona School of Management.



La tesis completa podría describirse del siguiente modo:

  • La mentalidad y prácticas burocráticas de dirección que predominan en nuestras sociedades, está provocando un descontrol generalizado, y amenazas a la sostenibilidad, laeficiencia y la innovación en muchas organizaciones.
  • Los intentos burocráticos de dominar la realidad a base de simplificarla y ensayar un control desde arriba, se están mostrando incapaces de enfrentar la complejidad creciente con que van tratando las organizaciones.
  • En la realidad, las organizaciones se mueven en entornos de personas y grupos con visiones e intereses diferentes, y aun en conflicto. La eficacia que consiguen las direcciones obtengan sus organizaciones, depende la capacidad de coaligar las personas y grupos con poder suficiente alrededor de una visión compartida de la realidad, un compromiso con  una tarea que responda de la mejor manera posible a los intereses en presencia, y un entrenamiento que haga eficientes a los actores que deben ejecutar esa tarea.
  • El control desde arriba, se sustituye así por el autocontrol de los actores, en el marco de las condiciones que acabamos de configurar.
  • Coaligarse es función actividades políticas, es decir, de unejercicio ético e inteligente del poder por parte de politicos capaces (= aquellas personas con poder que equilibran sus intereses con los intereses de los demás).
  • La buena política, política constructiva, como diferente de la mala política o política destructiva, radica, precisamente en el equilibrio entre los motivos desinteresados y los motivos egoístas.
  • La política constructiva genera interacciones productivasmientras que la mala política genera interacciones tóxicasque reducen las capacidades potenciales de la organización. Las interacciones productivas tienen su base en el intercambio satisfactorio de valores entre los actores. 
  • Este intercambio requiere una identificación previa de los valores de los actores, que no siempre los conocen bien. Para contribuir al desarrollo del autocontrol de los actores, los diálogos sobre valores por medio del análisis narrativo sobre anécdotas vividas como positivas o negativas,pueden contribuir a cubrir esa herencia negativa de la mentalidad generada por las prácticas burocráticas de dirección.
  • A partir de los valores que contribuyen a la eficacia de la organización y al desarrollo de las personas, se pueden generarprácticas de organización y dirección  nuevas y distintas,que superen las malas consecuencias enunciadas más arriba de las prácticas burocráticas. 
  • Hay una línea muy fina entre el uso y el abuso del poder. Históricamente, y en el plano de las ideas, los principios de la democracia política nos ofrecen un modelo para entender el uso del poder en concordancia con los intereses a largo plazo de otros. El rigor con que esos principios son llevados a las práctica en cada organización - y en cada sistema político - en función de las reglas que se ha dotado  para ello, nos permitirá encontrar situaciones de política constructiva, o de lo contrario.   
Las consecuencias de esta tesis, son aplicables a cualquier tipo de organizaciones, como teoría generativa de la teoría específica de cada organización, sea pública o privada.
   ----------------------------------------------

Leer + en www. marcoslekuona.net/ agenda, "Organizándose para la Acción Política Eficaz" y "Dirigir bien requiere hacer política..." 
y en www.fcampalans.cat/uploads/publicacions/pdf/comoganaryperdervotantes_def.pdf

viernes, 6 de julio de 2018

¿QUE HACER CON LOS VOTANTES? DOCUMENTOS ANEXOS






A lo largo de los últimos años he venido publicando en este blog entradas que trataban aspectos de "QUÉ HACER C0N LOS VOTANTES".
En este he procurado no repetir algunos aspectos que pudieran ser interesantes para profundizar en la práctica de qué hacer.
Son muchas estas referencias. Aquí quisiera llamar la atención sobre las siguientes:


  • COMUNICÁNDOSE EFICAZMENTE EN LA POLÍTICA. 17/sept/2014
  • LOS PRINCIPIES DEL SIGLO XXI (I Y II). LOS PARTIDOS QUE EMPODERAN A SUS VOTANTES Y SUS ACTIVISTAS.  4/sept/2.014
  • 4 CLAVES PARA COALIGARSE CON LOS VOTANTES  17/ag/2.014
  • PRESTANDO SERVICIOS POLÍTICOS A LOS VOTANTES Y SUS LIDERES DE OPINIÓN  11/en/2012
  • UN EJEMPLO DE UTILIZACIÓN DE MÉTODOS NARRATIVOS PARA ELABORAR UNA POLÍTICA DE ABAJO ARRIBA DESDE LOS BARRIOS. 
  • APUNTES DE LA REALIDAD PARA LA EFICACIA DE LAS ORGANIZACIONES POLÍTICAS LOCALES. ESCUCHAR HISTORIAS Y CONTAR HISTORIAS PARA MEJORAR SU INTERCAMBIO EXTERNO E INTERNO  14/jun/2.016

Estas pueden ser algunas "lecturas de vacaciones" para una política y su comunicación centradas en el votante.



jueves, 5 de julio de 2018

¿QUE HACER CON LOS VOTANTES?










Las formas más convencionales del marketing político – orientado a sí mismos, orientado a la venta- tienden a generar un votante pasivo, cuya contribución se limita a depositar el voto favorable. Para ello despliega una serie de estrategias, presentaciones y mensajes para persuadir, convencer, seducir. Con frecuencia, observamos que este es un voto libre que se puede mover fácilmente a impulsos de coyunturas y de éxitos mediáticos.
En cambio, puede observarse en municipios donde el voto permanece estable para un partido, cómo estos resultados vienen apoyados en votantes que, además, aportan un trabajo voluntario con otros votantes, o fondos para financiar las campañas.
Este apoyo de los votantes se suele corresponder con otros comportamientos del partido/grupo municipal que prestan a esos votantes servicios políticos en orden a “formar y manifestar su voluntad política”.
Lo cierto es que la educación de los votantes para identificar sus intereses y llegar a formulaciones colectivas de ellos, está muy poco desarrollada en nuestro país, tanto por la educación formal, los medios de comunicación, las instituciones públicas y los partidos políticos.  De ahí una buena parte de la desafección política, que se manifiesta de un modo mucho menos acusado en aquellos lugares donde los políticos han sabido asumir la tarea de liderazgo que significa ayudar a que sus votantes identifiquen sus intereses y valores y se organicen para alcanzarlos.
Los ciudadanos, en una parte se formaron en un régimen que “no creía en la política”, y otra que ya vivió en democracia en toda o la mayor parte de su vida consciente, pero que, al margen del fugaz intento de formación para la ciudadanía, la formación política ha estado en manos de unos partidos que, a duras penas han sido capaces de formar a sus militantes y cuadros y de unos medios más atentos a defender intereses parciales que en proporcionar visiones “objetivas”.

Así con las excepciones locales evocadas, los electores y los votantes de cada partido, viven una sociedad fragmentada, han podido reflexionar poco sobre cuáles son sus intereses y qué hacer para lograrlos colectivamente. Así no es de extrañar, los buenos resultados que consiguen aquellas organizaciones locales que han sabido preocuparse por prestar este servicio. Y es recomendable, que los dirigentes políticos observen con detenimiento cómo lo hacen esas organizaciones y sus líderes.






Lograr esa ayuda adicional de los votantes, se ha ido logrando en cada sitio y momento de un modo peculiar.
Para los que quieran proponerse empezar o ir avanzando por este camino, aquí recogemos algunas guías extraídas de la experiencia que cada equipo de dirección debería ajustar a su circunstancia.  
Una buena vía para ir entrenando políticamente a los votantes – a identificar sus necesidades y valores, y aprender a trabajar colectivamente para lograrlos – se encuentra en la constitución de “comunidades de votantes”, de una o varias secciones electorales o de un barrio.  El proceso de constitución de estas comunidades puede iniciarse en el descubrimiento y puesta en común de aquellas medidas de las instituciones o los partidos que cada votantes considera que mejoran/perjudican su calidad de vida. Este material permite hacer un diagnóstico de cada unidad territorial desde el punto de vista de los valores e intereses de los votantes y no de criterios técnico-burocráticos. Elaborando algún tipo de documento como “El barrio que vivimos” se cuenta con un soporte que podría servir para la educación de aquellos que no han querido o podido manifestarse.
En paralelo, también podrían entrenarse los votantes en identificar necesidades y priorizarlas colectiva y democráticamente  en pequeños grupos de no más de 12 personas, que después podrían ir sintetizando sus conclusiones de un modo piramidal.
Estos procesos pueden conducir a acuerdos como “El barrio que queremos”, como principio de una estrategia que vaya estableciendo una política de abajo arriba.
Mantener estos procesos en marcha, va a requerir entrenar a los líderes de opinión de los votantes a organizar para ir transformando los recursos en poder para cambiar las cosas, a través de activistas que han sido entrenados en organizar al ir formando las comunidades de votantes.
Los activistas y los líderes de los votantes, han de aprender es ese arte de organizar a diferenciar y respetar sus respectivos papeles, y a coaligarse en la tarea común de conseguir los cambios que las necesidades requieren.
De este modo, este coaligarse como “crecer juntos” (del latín “coalescere”), es el aglutinante de un “voto apalabrado”. Las actuaciones de comunicación en los medios masivos y las redes virtuales tendrán tanta mayor eficacia cuanto evoquen y difundan los contenidos de estas coaliciones.
Los dirigentes de los partidos implicados tendrán que tomar en consideración esta política de abajo arriba, si quieren contar con el apoyo de sus votantes, configurando un liderazgo democrático y ubicuo, más allá de las prácticas burocráticas actuales.
La posibilidad de que los partidos de izquierdas alcancen coaliciones estables aumenta con el logro de coaliciones en los barrios y en acuerdos sobre la política de abajo arriba.







Avanzar en esta línea no se consigue enseguida, y por supuesto no se puede pretender implantarlo para estas elecciones. Pero con ese argumento no se empieza nunca a mejorar las cosas. La eficacia política de los resultados de una elección, depende en gran manera de mejoras en la acción política que solo se consigue a través de proyectos a medio plazo. Cualquier momento es bueno para empezar estos proyectos, sobre todo si se tiene en cuenta que como aprendizajes sociales que son habrá que empezar de un modo experimental, en escala o territorios reducidos para ir sucesivamente ampliando su ámbito de actuación. Cualquier paso experimental que se vaya dando tendrá efectos beneficiosos a corto plazo – reducidos al ámbito que comprenda – y a medio plazo, en la medida que sirva para ir armando una política global.



domingo, 1 de julio de 2018

¿TAREA DE VACACIONES? Pensando en los resultados de 2.019








A menos de un año de las próximas elecciones, ¿es conveniente tomarse dos meses de vacaciones del trabajo político electoral? ¿Qué decir de llegar al otoño, mirando hacia arriba, sin tener un plan de campaña para empoderar el capital social partidario?


Como apoyo a plantearse/contestarse las preguntas de la dirección - ¿Adónde estamos yendo? ¿Dónde queremos estar en 2.019? ¿Cómo llegar allí? – este blog ha venido ofreciendo durante los meses de mayo y junio varias entradas, que recomiendo leer a quien no haya empezado aún.
Para los que ya arrancaron, vamos a acompañarles durante julio y agosto, con varias entradas más,  que van a ir profundizando en propuestas de prácticas en 4 claves:

v Empoderar votantes y militantes
v Dotarse de un lenguaje de valores de los votantes (“narrativa pública”).
v Aprender a trabajar/dirigir por proyectos de resultados.
v Localizar oportunidades de iniciar y mantener conversaciones políticas para coaligarse.

Sobre los cinco ejes de proyecto que proponíamos inicialmente – dirigir conscientemente; orientar la organización a los resultados; enraizar el activismo/liderazgo político; aumentar y mejorar la generación de valor público; madurar las coaliciones internas – y, sin olvidarnos de ellos, vamos a dedicar un énfasis especial a,
Ø La conveniencia de proponerse la formación y el entrenamiento políticos de los votantes, más allá de las prácticas más corrientes de manipulación, venta y persuasión, en el interior de comunidades de votantes y en coalición con los líderes de opinión.  Por el camino habrá que proponerse la formación y entrenamiento políticos de los militantes, más allá de consignas y argumentarios.
Ø La mejora de la eficiencia del trabajo político, al organizarlo y dirigirlo como proyectos que producen resultados, superando la práctica más normal de los partidos como empresas de eventos socioculturales.
Ø El abandono de los discursos unilaterales, por conversaciones que parten de escuchar “humildemente” antes de decir